"Noite Meiga, noite de conxuros e de desconxuros..."
Así empieza el canto de la Noite Meiga en Sarria, al son de esta musica salen a bailar las brujas en un aquelarre pagano para espantar a los malos espiritus.
Hace muchos, muchos años en la antigua aldea de Sarria vivian en total armonía las gentes de este lugar con un gran elenco de seres maravillosos, se dice que en los bosques abundaban los duendes y a las afueras, en la montaña, habia un extenso poblado de brujas que cuidaban de las cosechas y las lluvias y ayudaban a los ganaderos aun que la relacion directa entre hombres y brujas no fuese politicamente correcto.
Se dice que por aquel entonces una adinerada familia vivia en la aldea, ya casi villa, y que, en dicha familia, habia un joven apuesto, guapo y bondadoso al cual no le faltaban pretendientas en toda la comarca. Asimismo en el poblado de las brujas habitaba la hija de la bruja mayor de la que, segun dicen, su belleza superaba todo lo visto hasta entonces por los ojos de los hombres.
Quiso el destino, como no podria ser de otra manera, que el joven apuesto hijo de la familia adinerada tubiese por costumbre, en las noches de luna llena, pasear por las afueras, entre los arboles, a solas con sus propios pensamientos y fué de esta forma como la joven bruja y él se conocieron, enamorandose perdida el uno del otro aun a sabiendas de que nadie aprobaria la unión de tan buen heredero con una representante de la estirpe de las montañas.
Así pués se veian a escondidas en las prfundiades del bosque, amandose locamente y planeando una escapada sincera fuera de todos los impedimentos de su condición.
Pero los bosques nunca están vacios, alguíen vió aquellos encuentros y ese mismo alguien alerto a la madre del chico que, montada en colera, dispuso no permitir que su herencia familiar callese en manos de una "despreciable" bruja. Por lo tanto, a la mañana siguiente, una comitiva acompaño al joven hasta tierras de castilla donde fué internado en un monasterio del que, suponemos, nunca más salió.
La bruja acudió esa noche a su encuentro en el claro del bosque, como cada noche, desconociendo la suerte de su amado y allí esperó, invadiendose en pena a cada minuto, hasta que, al amanecer, los duendes y mensajeros le dieron la triste noticia. Entonces ella rompió a llorar desconsoladamente en aquel claro de la montaña, y tan sinceras fueron sus lagrimas que la montaña se conmivió con su pena y rompió a llorar también, formando, con ambos llantos, el rio Sarria.
Al enterarse de esto la madre de la chica, la bruja mayor, llamo esa misma noche a todo el poblado así como a los trasgos y demás criaturas, y ante el fuego de una enorme hoguera y armadas con antonchas llevaron a cabo un gigantesco akelarre invocando a las fuerzas de la naturaleza con el fin de lanzar un echizo por el cual ninguna pareja de amados pudiese ser separada nunca más por casusas de naturaleza, raza o condición social, y se dice que cada año se reunian en la misma fecha, ultimo Sabado de Agosto, para renovar el echizo con un nuevo akelarre.
Y esta es la leyenda de la Noite Meiga y por este motivo, desde hace 34 años, el ultimo Sabado de Agosto, hay en Sarria una gran fiesta con actos varios, conciertos y demás para, sobre la 1 de la mañana, escenificar el ya citado akelarre con la finalidad de renovar el echizo y con la ilusión de que tenga, realmente, efecto. Por eso cientos de personas se reunen cada año en Sarria para que así también puedan disfrutar del conjuro y de un año de amor verdadero.
Fuz Neviros (miembro de la asociación Meigas e Trasgos y uno de los organizadores de la Noite Meiga) :D